Superada la pasión y la entrega del primer tramo, toda relación de pareja atraviesa momentos de tensión y desasosiego. Sabemos que la química de la pareja construye su propia sombra y ésta siempre implica un reto emocional. Entendemos la sombra como el juego psicológico que salpica y contamina con las basuras estancadas de cada miembro. Expongo las situaciones emocionales más comunes en las relaciones.
1. Las luchas de poder, el afán de tener la razón o salirse con la suya desde lugares de autoridad o del miedo. Querer cambiar al otro es un mecanismo de control que genera mucha rabia y frustración.
2. La reactividad, cuando uno de los miembros está muy centrado en sí mismo y asume cada desencuentro como una batalla sin plantearse la responsabilidad afectiva.
3. Los celos, una respuesta común a la falta de amor y validación propia que genera mucha desazón.
4. La ignorancia emocional, estar muy centrados en la razón y la lógica de las situaciones ignorando la importancia de las propias necesidades y gestión emocional.
5. La culpa, un sentimiento tóxico que divide, nos empequeñece y nos debilita.
6. La vergüenza, otro sentimiento profundo e infantilizado que nos esconde y desempodera.
Sabemos que el trabajo en psicoterapia de las tres C’s son clave para que una relación de pareja funcione: la comunicación abierta, la conexión y la compasión mutua.